sábado, noviembre 27, 2004

Extraña democracia

El líder republicano de la Cámara de Representantes Dennis Hastert anunció la semana pasada una nueva política en la cual el Congreso aprobará solamente aquellas leyes que tengan el voto de la mayoría de los representantes republicanos, sin tomar en cuenta la opinión o el voto de los demócratas.

Esto culmina un proceso de varios años de duración dirigido a limitar la influencia de los demócratas y refleja una clara intención de los republicanos de convertir el Congreso en una institución monopartidista.

En la Cámara de Representantes, una mayoría dentro de la mayoría republicana significa un total de 116 representantes. Por lo tanto, se necesitaría tan sólo una cuarta parte (26%) de los 435 congresistas elegidos por el pueblo para decidir con poder casi absoluto si una ley es puesta a voto o no.

Es éste un ejemplo de democracia participatoria o del poder de una minoría?

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